Un Yo que se ha dormido talves por mucho tiempo ya
que se ha balanceado entre la muerte con enaguas rotas talves mucho ya,
que ha blandido una espada de polvo y angustia por efímeras esperanzas....es demasiado ya
Un Yo que ha caminado descalzo con piernas de agua, ha llegado ya,
un Yo que aún busca entendimiento entre rocas de sal y tierra de polvo, ha entendido ya,
que la propia mente que la carga es la misma que le ata
que el ahora que sostiene en sus manos, es pasado ahora, y ahora y ahora
que los colores que olvidó, nacen entre los dedos borrosos que su memoria sustituyó por navajas de oro.
Un Yo que se desdibujó entre confundidas afirmaciones,
que se abalanzó a la muerte sin haber existido primero,
un Yo que incontables veces dejó de respirar pensando que moriría, olvidando que aún no vivía
que sostuvo la agonía como armadura decidida
ha entendido ya
que la propia mente que la carga, es la misma que le ata.
